jueves, 10 de marzo de 2011

Capítulo VI

Era viernes, al fin se habían terminado las clases del día, yo iba a llevar a Ángela a casa, Alice nos acompañó hasta la puerta de mi camioneta.
Bella: Alice, te apetece ir al cine esta noche? Voy con Ángela.
Alice: Si, claro… porque no? Aunque… hoy había quedado para ir con mis hermanos a cenar…
Bella: bueno pues, venís después, hoy Charlie me deja estar por la calle hasta las 12, es un milagro! –miré a Ángela que estaba a mi lado y se reía conmigo-
Ángela: Es cierto, en estos dos meses que lleva aquí… -se puso recta- ¡A las 10 en casa Bella! –dijo imitando la voz de Charlie, no pudimos evitar reírnos las tres-
Alice: Vale, entonces… a… las 9 ¿delante del cine?
Bella: Si.
Alice: pues hasta luego chicas. –se dio la vuelta para irse-
Bella: Alice! –se giró- vendrán todos tus hermanos?
Alice: Si, pero no tenemos porque ir a la misma sala. –me sonrió-
Bella: Esta bien, aunque no me importa. –fue hasta el coche de Edward, un Volvo plateado y se subió, poco después desaparecieron-
Ángela: Un día de estos, van a tener un accidente, Edward conduce demasiado rápido. –me puse a reír, a mi no me importaría tener un accidente si era por estar con él, encendí la camioneta y llevé a Ángela a su casa-
Bella: Tú y yo sí que vamos a cenar juntas ¿no?
Ángela: Claro! Ven a buscarme a las… ¿7?
Bella: eso esta echo.
Cuando llegué a casa, Charlie aun no había llegado, así que me puse a hacer la comida. No tenía muchas ganas de cocinar, así que unos espaguetis lo arreglaban todo. Cuando terminé de cocinar, aun no había llegado nadie a casa, así que llamé a comisaria.
P: Comisaria de Forks.
Bella: Hola, soy Bella, la hija de Charlie Swan. Esta él por ahí?
P: ooh! Bella! Claro, ahora te lo paso. –se escuchó de fondo- Charlie, es tu hija-
Charlie: está bien?
P: No lo sé, solo me ha preguntado por ti –se puso al teléfono-
Charlie: Bella? Que ha pasado?
Bella: Charlie, estoy bien, no ha pasado nada, te llamaba solo para saber si vendrás a comer.
Charlie: Hoy?
Bella: No, mañana –dije irónicamente-
Charlie: Mañana?
Bella: No papa! Hoy!
Charlie: Bella! No me líes! –nos pusimos a reír-
Bella: Bueno, que?
Charlie: No, hoy tengo bastante trabajo, y llegaré tarde, así que come tranquila cielo.
Bella: Vale. Oye, esta noche al final me voy con Ángela y Alice al cine.
Charlie: Solo las tres?
Bella: No bueno, también vienen los hermanos de Alice.
Charlie: ah... bueno... pues… diviértete.
Bella: Así lo haré. Un beso y nos vemos cuando vuelva.
Charlie: Vale. Hasta más tarde.
Comí sola, aunque eso me sirvió para pensar. En estos dos meses que llevaba en Forks, había conocido a muchísima gente, y siempre estaba ocupada, y eso no me había dejado tiempo de pensar en cómo eran esas personas nuevas en mi vida. Las personas más cercanas que tenia eran Mike, aunque últimamente decía que estaba más por la rarita de Alice que por él, y que eso era nuevo, ya que los Cullen nunca antes se relacionaban con alguien que no fueran ellos, yo solo le respondía que tenía que saber llevarlos. Ya conocía a todos los hermanos, eran encantadores, menos dos, Edward y Rosalie… Edward sin duda a mis ojos era el más hermoso, y por lo que podía ver, para todas las chicas del instituto también. Pero tenía algo… no me miraba casi nunca, y solo me hablaba en los ensayos de teatro. Puede que no le cayera bien… Pero que le había hecho yo? Pero lo que más me molestaba, era que mientras él pasaba más de mí, a mí más me gustaba él. Había algo, que me decía que eso era malo, que había algo en él que no era bueno, pero el corazón me decía otras cosas… Alice en cambio, se había abierto a mí como un libro infinito, cada día me contaba historias, y con ella me pasaban las horas volando, igual que Ángela, que sus batallitas con su hermano eran películas.

No hay comentarios:

Publicar un comentario